Desembarco en las tierras altas. Novatos peligrosos en transmisión. De la comunicación de la ciencia a la comunicación de la ciencia: retroalimentación positiva.

miércoles, julio 21, 2004

En pocas palabras. (Una mirada atrás).

Los piratas de la ciencia han llegado. Bucaneros de ojos claros, desarrapados y agotados.

Tres días antes, zarparon valientes. Preparaban el abordaje, maldiciendo vehementes, los viajes con un único destino. Pícaros sonrientes que afilaban entre sus dientes sombras de cristal; frágiles dulces palabras tiernas. Pequeños encuentros furtivos entre ojos casi desconocidos.

Llegan al pueblo entre las nubes. Los piratas, sucios maleantes de la palabra, se estrecharon en su alquilada guarida, hermosa cabaña con vistas al mar, océano de placentera discusión. Solo lo atravesarían con la ayuda de remos de ilusión.

Poco a poco la batalla entró en sus fauces. Entre almirantes, capitanes y coroneles de la ciencia, camuflados, esperan la hora del abordaje, del robo indiscriminado. Incorporan a sus arcas nuevas joyas caras: blancas hojas llenas de relucientes palabras, muchos contactos y, ¿por qué no?, una bonita sonrisa de una chica que te gusta.

Pasaron los días entre muchas batallas, unas más productivas, otras algo menos. Los piratas, dignos herederos de los paseos zigzagueantes, buscaban, en el descanso de la noche, algo de música y ron, como no. En esos momentos de encuentro en un atardecer, abandonándose a las charlas sin fin, los piratas se convertían en ladrones de si mismos. Como en una noche de temperaturas frías, los piratas siempre roban lo que abriga.

Ahora, ya desde la distancia, los filibusteros se refugian, cada uno en su destino. Con ojos claros o dulces piedras de miel; han compartido esas miradas, furtivas, entre la batalla y entre la noche. Han robado lo que han podido, y, lanzando sonrisas quizá recuerden que el robo es suyo, que siempre les acompañará.

Pirata Sarraceno.

domingo, julio 18, 2004

Domingos en la sierra.

Fin. Días de desenfreno se detienen aquí.

Exhaustos, contentos. Sensaciones contradictorias provocan interferencias que recorren nuestro organismo. El otro, el que llevamos sobre los hombros, interpreta las señales con espíritu positivo y no las traduce como cortocircuitos.

Bien.

Días de turismo, convivencia, aprendizaje, desarrollo de proyectos y crecimiento personal. Tal vez demasiado nuevos, quizás entusiastas y activistas, sin duda apasionados. Los Piratas están dispuestos a repetir la experiencia.

L@s chic@s de la UPF

Guap@s, silenciosos y críticos.
Esperamos ver a estos seres haciendo cosas interesantes pronto. Es una pena que no hayan tenido un espacio dentro de la programación. No debería faltar lugar para las ideas refrescantes. Hemos perdido un vuelo hacia nuevas fronteras.
No hay prisa, quizás en un futuro nos cansaremos de oirles.